Agobiado por la opulencia y los excesos, la vida de un rey se detiene en seco cuando sufre un dolor de estómago como ningún otro. No puede pensar, no puede dormir, no puede hacer nada de lo que se espera de un rey por culpa de este dolor insoportable que él mismo se ha provocado. Su palacio dorado se convierte en una jaula de lujo llena de malestar, y solo el pensamiento sensato de un hombre sencillo —que ha encontrado la verdadera riqueza de la vida— puede ayudarle a encontrar alivio. Descubre cómo encontrar y valorar el tesoro de tu propia vida apreciando todos los dones invaluables que Alá Todopoderoso ha puesto en ti.